La ciudad está atravesando una ola de calor desde hace varios días y el problema del agua lejos de resolverse está cada vez peor. Las temperaturas escalan arriba de los 30° y encuentran a una localidad que no está preparada para la situación.
Zona este, que veranos atrás no sufría esta problemática ahora la está padeciendo, vecinos que hace más de cuatro días manifiestan no tener este elemento vital y otros que tuvieron que salir de apuro a comprar bombas.
En cambio, zona oeste ya lleva largo tiempo aprendiendo a arreglárselas como pueda y manejarse con este escenario en el que cuando llega el servicio, llega con muy poca presión.
Pero en el medio de todo esto, se encuentran las personas que arman sus piletas y en la mayoría de los casos deben llamar a los camiones y pagar para darse este pequeño lujo.
Mientras que Servicios Públicos, por su parte, lanzó hace casi una semana un comunicado solicitando que no se derroche agua: «En virtud de la gran demanda de agua y los problemas que genera esto a los vecinos en zonas de baja presión se solicita a la comunidad extremar el cuidado de este vital elemento… el agua que se tira a la calle es agua que le falta a un vecino para llenar su tanque. Por favor seamos solidarios.», indicaron desde la empresa estatal.