Un día como hoy fue marcado por este hecho que quedará en la memoria de los y las (ex) trabajadoras municipales truncadenses que fueron desafectados de sus puestos laborales a fines del año 2020. La justicia tiempo después desestimó el pedido de este grupo de desocupados, a esto se le sumó la pandemia y restricciones que obligaron a las personas a quedarse en sus casas, cubriendo de olvido todo el conflicto.
Pero… ¿Qué pasó ese día?
El año 2020 comenzaba y las esperanzas de recuperar sus empleos no disminuía, por el contrario: se organizaron y empezaron por apostarse en la Secretaría de Medio Ambiente y Obras Públicas, lugar en el que pocas semanas después se vieron obligados a abandonar. Un virus del que poco sabíamos atemorizaba al mundo y había aterrizado en nuestro país.
Cuarentena estricta y todos a casa. Pero él hambre no espera y cuando las cuentas empiezan a acumularse no hay mucha vuelta que darle: volvieron a la calle.
Este grupo de desempleados se ubicó con sus carpas afuera del edificio municipal, y ese 21 de Mayo estuvo colmado de nerviosismo desde su inicio. Hubo quienes se encadenaron, quien se subió al techo de la comuna, quien trepó a una torre de luz y hasta quien amenazó con prenderse fuego. Llegó la noche y aunque a las 20 hs. ya no se podía circular, la gente no se dispersaba. Esperaba ser recibida por el Ejecutivo Municipal.
21:30 horas los manifestantes -cansados de esperar la salida de sus voceras quienes habían ingresado horas antes- entraron al edificio y fue cuando sonó el primer disparo de la Policía de Santa Cruz que vendría acompañado de muchos más: balas de goma, corridas y desesperación.
Esa noche dejó un saldo de 17 personas detenidas y 11 heridos. Algunos fueron detenidos por violar el DNU y otros por romper vidrios de la comuna en el intento de salir en pleno desalojo.