Un grave hecho ocurrió este fin de semana en el Hospital Zonal Pedro Tardivo, de Caleta Olivia, cuando un enfermero se llevó a un recién nacido para vacunarlo, y luego desapareció del lugar sin que se vuelva a conocer el paradero de ninguno de los dos.
Gisel Ance, tía del niño, denunció en Radio Vanguardia que el sábado 23 de noviembre, a las 16:30 horas, un enfermero le dijo a su hermana, Samantha, que se llevaba al recién nacido para colocarle una vacuna, pero que este nunca regresó a la sala y desde entonces no saben nada del bebé. “Iban a ponerle una vacuna antes del alta, algo normal. Nunca sospechamos nada raro», dijo la mujer.
Minutos después, un policía entró a la habitación donde la madre del niño permanecía internada y les dijo que el bebé había sido retenido por personal de Niñez. A partir de esto, los familiares comenzaron a recorrer comisarías, juzgados y oficinas municipales sin que obtuvieran respuestas en ninguno de estos lados y sin que les tomarán la denuncia.
Incluso, Ance reveló que una funcionaria del Niñez les dijo que “el bebé no tiene apellido, no es de nadie». En relación a esto, la tía del niño aclaró que el nacimiento se produjo el jueves 21 de noviembre y que cuando quisieron anotarlo, en el Hospital no se los permitieron.
«No nos dejaron hacerlo antes (del alta), así que queríamos registrarlo el lunes. ¿Qué buscan con esto? ¿Quieren darlo en adopción? Todo es muy raro», expresó Ance; a la vez que relató un hecho igual de grave que la desaparición de su sobrino: un policía le habría apuntado con su arma reglamentaria al papá del bebé mientras intentaban averiguar dónde se lo habían llevado.
«(El bebé) Tiene familia que puede cuidarlo. Lo único que pedimos es que esté con nosotros. Esto es desesperante y no entendemos por qué hicieron esto», finalizó la tía del niño.
Escueta aclaración sobre el hecho
El matutino Tiempo Sur publicó una escueta explicación dada por los funcionarios municipales sobre el hecho ocurrido en el nosocomio caletense este fin de semana.
Según lo publicado por el diario, el bebé quedó bajo la guarda de la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia de la Municipalidad de Caleta Olivia por disposición de la Justicia. El argumento para esta decisión es que, al parecer, la madre sería incapaz de atender y criar al menor ya que sufriría algún tipo de trastorno psicológico.